miércoles, 28 de noviembre de 2012



En Luxor Amenofis III construyó un templo en honor a Amón, el más bello y perfecto de cuantos se levantaron en Egipto. Con el transcurso del tiempo, pasó de templo egipcio a romano, de este a Iglesia cristiana y llevó a convertirse en una mezquita musulmana, que aún hoy se conserva. Nos lo cuenta Francisco José Gómez en DIOSES, TEMPLOS Y ORÁCULOS.

No hay comentarios:

Publicar un comentario